La ciudad de Ningbo, ubicada en la provincia de Zhejiang, al este de China, ha dado un paso significativo hacia la gestión de riesgos al establecer una plataforma de gemelo digital capaz de simular inundaciones en el río Yongjiang. Este avance tecnológico ha mejorado la capacidad de control y gestión de riesgos, fortaleciendo la resiliencia de la ciudad ante posibles eventos naturales.
En la reserva natural de Tianzhou, en la ciudad de Shishou, provincia de Hubei, en el centro de China, un sistema inteligente de protección ecológica está marcando la pauta en la conservación animal. Monitoreando la temperatura del agua, los niveles de oxígeno disuelto y la ingesta de alimentos de los delfines sin aleta, este sistema garantiza una protección más precisa y efectiva de la fauna, demostrando el potencial de la tecnología para contribuir a la preservación del medio ambiente.
La provincia de Shaanxi, en el noroeste de China, ha lanzado una plataforma digital innovadora destinada a la gobernanza ecológica rural. Con funciones que abarcan desde el monitoreo del medio ambiente rural hasta servicios de información geográfica visual, esta iniciativa busca impulsar prácticas sostenibles en las áreas rurales, promoviendo un desarrollo equilibrado entre lo digital y lo ecológico.
China, en los últimos años, ha liderado el camino en la implementación de tecnologías digitales e inteligentes, como macrodatos, computación en la nube e inteligencia artificial, para abordar los desafíos ambientales. La convergencia de la digitalización y la ecologización ha emergido como una tendencia global, promoviendo la transición hacia un desarrollo económico y social más sostenible.
En línea con esta visión, el recientemente publicado plan maestro para construir una China digital establece objetivos ambiciosos para el progreso ecológico digital hacia 2025. Este plan propone la construcción de un ecosistema digital verde e inteligente, estableciendo nuevos estándares para las tecnologías digitales al servicio de la gobernanza ecológica.
La gobernanza ecológica, entendida como un proyecto sistémico, encuentra en las tecnologías digitales su aliado clave. Desde la identificación específica hasta el monitoreo en tiempo real de los datos ambientales, estas tecnologías se han convertido en prácticas habituales para abordar de manera sistemática y rápida los desafíos ecológicos.
Un ejemplo destacado es la provincia de Fujian, en el suroeste de China, que ha implementado una plataforma verde en la nube de macrodatos. Esta plataforma no solo monitorea desechos marinos y evalúa la calidad del aire, sino que también despliega estrategias avanzadas como el trabajo «P2P» en el centro de comando y la aprobación «sin papel» de transferencias interprovinciales de desechos peligrosos.
La digitalización y la ecologización no solo impactan la gestión ambiental, sino que también transforman modelos económicos y estilos de vida. China ha implementado políticas sólidas que han llevado a empresas de tecnología digital a desarrollar planes bajos en carbono. Desde la reducción del consumo de energía en estaciones base 5G hasta edificios energéticamente eficientes y aplicaciones digitales para la agricultura, estas iniciativas han reducido efectivamente el costo ambiental del desarrollo económico.
Se estima que las industrias reducirán sus emisiones de carbono en 12,100 millones de toneladas para 2030 mediante la aplicación de tecnologías digitales. La sinergia entre la digitalización y la ecologización no solo busca reducir el consumo de energía, sino también mejorar la eficiencia productiva y energética, promoviendo la integración profunda de las tecnologías digitales en la economía real para un desarrollo de mayor calidad.
A medida que la transformación verde y digital avanza, las aplicaciones digitales están permeando todos los aspectos de la vida diaria, desde la visualización de bienes raíces en realidad virtual hasta la firma de contratos sin papel. China se posiciona como líder, consolidando la base para el desarrollo de tecnologías ecológicas y ampliando los escenarios de aplicación de las tecnologías digitales, liderando así la transformación ecológica con la digitalización y promoviendo la transformación digital con la ecologización. La belleza de China continúa mostrando nuevas imágenes de un futuro sostenible.