El mercado mundial es un sistema de intercambio económico que incorpora todas las economías de los estados en los que operan las empresas. A diferencia del modelo tradicional de estado-nación, la economía mundial es una división funcional del trabajo. Se manifiesta un patrón de zonas núcleo, semi periféricas y periféricas.
La zona central, dominada por capitalistas industriales, explota a los trabajadores en todas las zonas del sistema mundial y redistribuye el valor excedente a la periferia. Este es un proceso que puede verse como reproducción de desigualdades a nivel de sistemas, pero también puede ser cambiante para los estados a medida que sus economías y políticas se desarrollan y se vuelven más competitivas.
También ha facilitado la propagación de la tecnología y la comunicación. La proletarización de los viajes y la comunicación ha hecho que las personas en todas las partes del mundo están ansiosas por las inauguraciones de la modernidad, ya sea que sean dispositivos o productos de alta tecnología como automóviles, acero, productos químicos, petróleo, cemento, productos y equipos agrícolas, construcción industrial y comercial, Servicios bancarios y de seguros, computadoras, semiconductores, transporte, instrumentos electrónicos, productos farmacéuticos y telecomunicaciones.
Sin embargo, las diferencias en las preferencias nacionales persisten en todas partes. En los Estados Unidos, por ejemplo, todavía es posible encontrar diferencias en los modelos de automóviles o la falta de interés en ciertos tipos de bienes de alta tecnología. Estas diferencias reflejan las variaciones idiosincrásicas y hereditarias de una cultura nacional que las generó y fomenta. Pero ya no controlan el comercio y, de hecho, están siendo desafiados por las fuerzas irresistibles de la estandarización global.
Las corporaciones que están orientadas a esta nueva realidad, que venden bienes de consumo estandarizados en todo el mundo, pueden beneficiarse de las economías de escala en producción, distribución, marketing y gestión, traduciendo estas ventajas en precios mundiales reducidos. Esto les permite diezmar a los competidores que están atrapados en un paradigma obsoleto del mundo.
También han facilitado la propagación del desarrollo comercial y económico. La propagación del comercio abre los mercados a las empresas y, por lo tanto, aumenta los ingresos en aquellos países que abren sus fronteras, además de aumentar la productividad de las empresas y alentar la competencia del mercado. También ha mejorado las condiciones de trabajo, ya que los exportadores pagan salarios más altos que los no expertos y generalmente respetan los derechos laborales.
El mercado mundial y sus sistemas se basan en sistemas geo históricos, que son sistemas de relaciones sociales que se realizan concretamente a través del tiempo (tendencias y ciclos) y el espacio (extensión y orden). Reemplazan el uso ortodoxo del estado-nación como la unidad básica de análisis, porque nos permiten comprender el cambio social en términos de estructuras específicas que no se definen fácilmente a nivel de estado nación.
El mercado mundial es un sistema de cambio económico que ha surgido del capitalismo y se ha desarrollado durante varios siglos a su forma actual. Es un sistema dinámico que refleja el proceso de acumulación de capital y la lucha de clases, al tiempo que responde a la dinámica del ciclo económico mundial de crecimiento y estancamiento.