Lo que menos queremos a la hora de trabajar es hacerlo con rechazo, renegar y quejarse todo el tiempo. Tu lugar de trabajo debería ser uno de tus lugares más seguros donde te sientas bien, ya que realmente este espacio es donde pasamos la mayor parte del día.
A veces, por roces o desacuerdos, este lugar se convierte en un fastidio, donde la frase “no quiero ir a trabajar“ se vuelve recurrente y eso no es sano, ni para ti, ni para el lugar donde trabajas, ni para nadie.
La mayoría de las veces el jefe es el malo del cuento donde todos los demás solo deben realizar lo que él ordene y punto, pero existen muy pocos empleados que realmente saben la responsabilidad que un puesto de jefe conlleva.
A veces ellos solo hacen su trabajo y aun así quedan mal. Sin embargo, existen algunas cosas que puedes implementar para mejorar la relación tanto con tu jefe, o con tus empleados o subalternos:
- Tómate el tiempo para conocer los objetivos de tu jefe o de la empresa en general
Es importante que comprendas lo que la empresa está tratando de lograr y las aspiraciones profesionales personales del empleado. Esto puede ayudar a establecer expectativas para los dos y proporcionar una base para que la relación se desarrolle con el tiempo.
- Se abierto y honesto sobre tus ideas
Puede mejorar tu relación con tu jefe si siempre estás abierto a compartir nuevas ideas que creas que ayudará a la empresa a crecer. Esto se puede hacer de muchas maneras diferentes, desde compartir nuevos métodos o procesos hasta ofrecer comentarios sobre qué tan bien está haciendo la empresa y qué cambios deben realizarse.
- Pídele comentarios a tu jefe
Una de las cosas más efectivas que puedes hacer para mejorar la relación con tu jefe es pedirles comentarios sobre tu trabajo. Esto no solo te ayudará a mejorar tus habilidades y asegurarte de que estás produciendo trabajos de alta calidad, sino que también te permitirá construir una conexión más fuerte con él.
- Hazte el tiempo para reunirte con su jefe regularmente
Debes programar registros regulares con tu gerente para discutir tu progreso y asegurarte de estar en camino de alcanzar tus objetivos. Esto puede ser tan simple como programar una reunión semanal para repasar tus tareas y progresos, o tan elaborado como organizar reuniones trimestrales para garantizar que tus objetivos estén alineados con los de la compañía en su conjunto.
- Se innovador y toma la iniciativa
Tomar el liderazgo en un proyecto o tarea puede demostrar que estás dispuesto a ir más allá de lo que se requiere de ti, lo que probablemente le dé a tu jefe la confianza en tus habilidades. Esto también es bueno para la empresa, ya que muestra que usted es un empleado proactivo y que está realmente interesado en ayudar a tu empleador a tener éxito.
- Comparte tus ideas con tu jefe
Hacer que tus ideas se escuchen y valoren es vital para tu desarrollo personal y profesional. Te ayuda a avanzar en tu trabajo y te convierte en un miembro más valioso de tu equipo.
Cuando ofrezcas tus ideas a tu jefe, siempre asegúrate de presentarlas de manera positiva y ser educado y profesional en tu enfoque. Esto ayudará a crear una relación sólida con tu jefe y te asegurará de que tengan más respeto por ti como empleado.