El liderazgo transformacional implica cambiar los puntos de vista de las personas y alentarlos a alcanzar su máximo potencial. Se trata de correr riesgos, hacer lo que cree y hacer cosas que beneficien a la organización y los miembros de su equipo.
Además, se trata de fomentar la colaboración, la innovación y la co-creación entre los empleados y los miembros del equipo.
Este tipo de liderazgo no es para todos. Si bien ciertamente hay aquellos con propensiones naturales para ello, puede ser un desafío para los demás.
Por lo tanto, los aspirantes a líderes pueden querer tomar un curso de capacitación de liderazgo que incorpore experiencia práctica con situaciones del mundo real.
Los líderes transformacionales suelen ser ambiciosos, innovadores y disciplinados. También tienen un nivel saludable de curiosidad y pueden inspirar confianza en sus colegas.
Además, están dispuestos a escuchar y aprender de las ideas de otros empleados. Ya sea que estén aspirados a ser un líder transformador o no, estas cualidades son útiles en un entorno en constante cambio.
A diferencia de los líderes transaccionales, cuyo enfoque está en la recompensa y el castigo, un líder transformador se centra en involucrar a los empleados en el cambio. Él o ella ayudará a crear una cultura de experimentación, alentará los comentarios de los empleados y alentará la resolución de problemas colaborativos. Como resultado, los miembros sentirán un sentido de propósito y estarán más comprometidos con el trabajo que realizan.